La cirugía de mínima incisión de juanete de sastre o quintus varus que realizamos en la clínica del pie Ariño – Rotaeche en Irún, es una técnica quirúrgica que busca corregir la desviación y la prominencia ósea del quinto dedo.
Este procedimiento se realiza mediante pequeñas incisiones de aproximadamente 2-4mm con técnicas poco invasivas guiadas en todo momento por un equipo de rayos X de última generación llamado fluoroscopio, que permite realizar la intervención sin realizar una cirugía abierta evitando la exposición de las diferentes estructuras del pie.
El juanete de sastre, también conocido como quintus varus, es una deformidad del pie que afecta al quinto dedo. Esta condición se caracteriza por la desviación del dedo pequeño hacia adentro, mientras que la articulación en la base del dedo se desplaza hacia afuera, formando una protuberancia. Esto puede generar dolor, roce con el calzado y dificultades para encontrar zapatos adecuados.
El término "juanete de sastre" proviene de la posición que adoptaban los sastres al sentarse con los pies cruzados, lo que ocasionaba presión sobre el borde externo del pie.
Existen diversas causas que pueden contribuir al desarrollo del juanete de sastre:
Los síntomas del juanete de sastre pueden variar dependiendo de la gravedad de la deformidad. Los más comunes incluyen:
En la Clínica del Pie Ariño – Rotaeche en Irún llevamos a cabo una serie de pruebas para realizar un diagnóstico completo del juanete de sastre o quintus varus:
La clasificación del juanete de sastre o quintus varus se basa en la gravedad de la deformidad:
En nuestra clínica recomendamos un enfoque conservador para aliviar los síntomas del juanete de sastre o quintus varus, prevenir su progresión y mejorar la calidad de vida del paciente. Estas medidas incluyen:
Si el tratamiento conservador no logra controlar los síntomas o la deformidad progresa, se puede considerar el tratamiento quirúrgico.
En la Clínica del Pie Ariño – Rotaeche somos especialistas en cirugía de mínima incisión para tratar el juanete de sastre o quintus varus. Estas técnicas quirúrgicas son menos invasivas en comparación con la cirugía tradicional y se realizan mediante pequeñas incisiones de 2 a 4 milímetros.
El procedimiento se lleva a cabo utilizando un equipo de Rayos X en tiempo real (fluoroscopio), que permite una intervención precisa sin necesidad de exponer directamente las estructuras internas del pie, como se hace en la cirugía abierta.
Dependiendo de la gravedad de la deformidad, los procedimientos quirúrgicos incluyen:
La cirugía de mínima incisión para corregir el juanete de sastre, también conocido como quintus varus, ofrece varias ventajas respecto a la cirugía tradicional o abierta:
La cirugía de mínima incisión es un procedimiento quirúrgico que se lleva a cabo mediante pequeñas incisiones, utilizando instrumentos especializados para tratar la deformidad del quinto dedo del pie. A través de estas incisiones, el cirujano ajusta los huesos y tejidos involucrados para corregir la alteración de manera precisa y con un impacto mínimo en las estructuras circundantes.
Entre los beneficios de esta técnica se encuentran la generación de cicatrices más discretas, una reducción significativa del dolor postoperatorio, una recuperación más rápida y un menor riesgo de complicaciones, como infecciones. Además, permite preservar de manera más efectiva las estructuras anatómicas cercanas, garantizando una intervención más precisa y menos invasiva.
La adecuación para este procedimiento depende de factores como la gravedad de tu deformidad, tu estado de salud general y otras condiciones específicas. El Dr. Ariño, podólogo cirujano, evaluará tu situación de manera detallada para determinar si este tratamiento es la opción más adecuada para ti.
El procedimiento consiste en que el cirujano haga pequeñas incisiones cerca del quinto dedo, utilizando instrumentos especializados para corregir la desviación y alinear correctamente los huesos. Aunque la técnica puede variar según el caso, generalmente incluye cortes y ajustes precisos para restaurar la posición anatómica adecuada.
El podólogo cirujano puede indicar medicamentos para aliviar el dolor y ofrecer recomendaciones específicas para manejar las molestias postoperatorias. Generalmente, el dolor es menos intenso en comparación con el experimentado tras una cirugía tradicional, gracias a la naturaleza mínimamente invasiva del procedimiento.
El tiempo de recuperación puede variar según el paciente, pero en general, la mayoría de las personas pueden retomar sus actividades cotidianas en unas pocas semanas. Es probable que se necesite el uso de un calzado especial temporalmente para proteger la zona intervenida y favorecer la correcta cicatrización.
Los resultados pueden diferir entre pacientes, pero la mejoría suele ser notable en las primeras semanas tras la intervención. Sin embargo, los resultados definitivos pueden tomar varios meses, ya que el pie necesita tiempo para recuperarse por completo y adaptarse a los cambios realizados.
El tiempo para regresar al trabajo depende tanto del tipo de intervención realizada como de la naturaleza de tu empleo. Mientras que algunas personas pueden reincorporarse en unas pocas semanas, quienes tienen trabajos que implican esfuerzo físico o estar de pie por largos periodos podrían necesitar un tiempo de recuperación más prolongado.
Al igual que en cualquier procedimiento quirúrgico, existen riesgos potenciales. El Dr. Ariño se encargará de explicarte detalladamente los posibles riesgos asociados y te proporcionará toda la información necesaria para que puedas tomar una decisión informada y segura.
El cirujano te dará instrucciones detalladas para prepararte adecuadamente para la cirugía. Esto puede incluir suspender algunos medicamentos, seguir indicaciones específicas de ayuno y organizar el transporte para que alguien te acompañe y pueda llevarte a casa después del procedimiento.